La semana pasada estuve redactando el informe del proyecto personal, aunque ya tenía hecho parte, todavía me quedaban varios puntos que debía hacer y que a su vez debía ir revisando para ver si lo que estaba escribiendo tenía sentido, o más bien si se entendían las cosas que había puesto hasta la fecha de la manera que yo quería que se entendiesen.
A parte de fijarme en la manera en la que este estaba siendo redactado, empecé a preocuparme puesto que, me estaba acercando al límite máximo de palabras (3500) y todavía me faltaban cosas por poner, así que decidí seguir escribiendo y pensé que si algo de lo que había escrito no era necesario, después podía contar con la ayuda de mi supervisor del proyecto para que me dijese que cosas debía de suprimir.
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